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Hay personas tan adictas a la adrenalina que crean caos y melodrama. Es como si, cuanto más cerca están del límite, más poderosas se sintieran. En cierto modo, es una sensación similar a disfrutar de una película de terror: de alguna manera, intensifica nuestra sensación de estar vivos. ¡Y todos necesitamos o queremos sentir eso! Cuando la vida es demasiado tranquila, es fácil pensar que es aburrida. En cuanto a la actual fuente de emoción en tu mundo: si la estás disfrutando, genial. Pero si deseas un fin de semana navideño tranquilo, puedes crearlo fácilmente.

Tienes el poder de hacer que esta temporada festiva sea especial, no solo para ti, sino también para tus seres más queridos. ¿Necesitas una varita mágica? ¿O un conjuro que recitar? ¿Algún tipo de sacrificio que hacer? En realidad, cuanto menos hagas, mejor. Lo esencial es que respondas de forma auténtica a lo que vaya sucediendo y elijas en qué quieres implicarte. Así, estarás en el espacio adecuado para apoyar a quienes luchan con los retos propios de estas fechas. El mayor regalo que puedes ofrecer es tu tiempo. Al darlo, recibirás mucho a cambio.

Antes de que se inventaran las luces de colores, los árboles de Navidad se decoraban con velas reales. ¡Uf! ¡Piensa en los riesgos para la salud y la seguridad! Por suerte, las luces eléctricas seguras y fáciles de usar nos permiten tener un árbol brillante y lleno de color durante días o semanas. A medida que te acomodas en el periodo posterior a la Navidad y previo al Año Nuevo, que siempre se siente curiosamente entre dos aguas, empiezas a brillar. Tienes la energía y los recursos necesarios para atraer a la gente hacia ti. Sé generoso con tu energía este fin de semana. Permitirás que otros también brillen.

Nuestro viaje por la vida nos lleva por un camino complicado. Sin embargo, a pesar de todo lo que has vivido, sigues siendo la misma persona que siempre has sido, aunque tu versión más joven quizá tendría dificultades para reconocer en quién te has convertido. Te encuentras gestionando una situación que te recuerda a un escenario del pasado. Esta vez, no obstante, estás más que capacitado para afrontarla. La Navidad está llena de momentos de nostalgia y, este fin de semana, te encuentras en una posición en la que puedes enfrentarte a un recuerdo y acabar sintiéndote fortalecido.

Esta es la época del año en la que familias y amigos se reúnen. Algunas de las personas con las que compartimos tiempo nos hacen sentir bien con nosotros mismos y con lo que estamos haciendo con nuestras vidas. Otras, en cambio, tienen el efecto contrario. Pero eso está bien. Y es completamente normal. Como en cualquier reunión social, hay momentos inevitables de tensión. Solo debemos tener cuidado de no caer en ese incómodo abismo entre cómo creemos que las cosas «deberían» ser y cómo son en realidad. Tus actividades de este fin de semana tienen el potencial de propiciar una conexión mágica. ¡No la dejes pasar!

Cuando Venus está en Capricornio, apreciamos más las pequeñas cosas de la vida. Y el cosmos te está regalando un tiempo de calma preciosa. Incluso si la nostalgia lleva tus pensamientos hacia recuerdos tristes, podrás guiarlos hacia temas más alegres. Así que, si te sientes tranquilamente satisfecho con la vida, ¿llegará una satisfacción aún mayor a tu camino? Este fin de semana, siendo consciente de todo lo bueno que hay en tu mundo, tomarás decisiones con consecuencias positivas. Si compartes tu alegría interior, harás que este tiempo entre una cosa y otra sea especial.

Nuestra Navidad moderna tiene raíces en festividades paganas. El solsticio, cuando el Sol parece detenerse en el cielo, se celebraba con las Saturnales y el Yule; y las celebraciones incluían banquetes, decoración con plantas perennes y el intercambio de regalos. Este fin de semana, es como si el cosmos pulsara el botón de pausa y nos regalara una oportunidad para reflexionar. El Año Nuevo trae consigo la posibilidad de dirigir tu vida en una nueva dirección. Para aprovechar al máximo ese potencial, necesitas ser consciente de tus sueños y deseos. No pasará mucho tiempo antes de que puedas empezar a hacerlos realidad.

Es fácil olvidar que la Navidad es una celebración espiritual. Sin embargo, a pesar del componente comercial, el tema que hay detrás de las fiestas no ha cambiado en más de dos mil años: seguimos asociando esta época del año con la paz y la alegría. Creas o no en la existencia de una deidad que responda positivamente a tus oraciones, gracias a tu sensibilidad y a tu intuición eres consciente de la interconexión del cosmos. Este fin de semana, una conexión con alguien aporta una comprensión tan profunda que se asemeja a un despertar espiritual. -

La tregua de Navidad de 1914 capturó la imaginación del público. En Nochebuena, las armas enmudecieron y se pudo escuchar a alguien cantando un villancico. Al día siguiente, soldados de ambos bandos salieron de sus trincheras, compartieron sus raciones, se hicieron fotografías y jugaron juntos al fútbol. Demuestra que, a pesar de nuestras diferencias, todos podemos encontrar un terreno común. Y que compartir tradiciones es algo poderoso. Este fin de semana, tu amabilidad y generosidad naturales pueden desactivar una situación potencialmente conflictiva. Puede haber mucha diversión. -

Las celebraciones navideñas difieren en todo el mundo, pero estemos donde estemos, hay tradiciones que seguir, y la repetición de actividades familiares es clave. Sin embargo, la verdad es que la vida siempre implica hábitos y rutinas. Y estás preparado para cambiar algunas de las tuyas. Aunque este fin de semana quizá no sea el momento de empezar a introducir cambios, nada te impide hacer planes. Muy pronto llegará el momento de ponerlos en práctica. Y si lo has pensado todo bien, cuando avances con paso firme hacia 2026, tus acciones serán gratamente eficaces.

Alguien en tu entorno, con una mentalidad muy negativa, amenaza con proyectar una nube gris sobre el fin de semana. Su pesimismo es lo último que alguien necesita ahora mismo. Y nada parece sacarlo de ese estado de ánimo. Tanto es así que empieza a afectar a tu entusiasmo. Así que… ahora que lo has notado, puedes actuar. Tu consciencia es clave. En lugar de ser víctima de su desaliento, si haces el esfuerzo de mantenerte positivo, neutralizarás su influencia. Hay mucho que esperar con ilusión. Y nadie tiene el poder de apagar la esperanza. -

Algunas personas se sentirán decepcionadas por no haber recibido todo lo que querían en Navidad. Por suerte, ese no es tu caso. Sabes que, solo porque sea época festiva, no hay garantía de recibir aquello que tu corazón realmente desea. Para empezar, ese tipo de cosas no vienen envueltas en papel brillante. Y también sabes que esos deseos profundos requieren tu implicación: no llegan simplemente servidos en bandeja. Aun así, con Venus en Capricornio, este fin de semana trae el potencial de que des pasos prácticos para hacer realidad uno de ellos. -